jueves, 27 de octubre de 2011

La Belleza en las Formas

           
 INTRODUCCIÓN

             La fotografía pasa por una comprensión del mundo y lo que nos rodea como 'algo más', algo que esconde un misterio para quien sepa mirar de una manera adecuada.

             La inmensa mayoría de las personas viven su vida acariciando la realidad sin imbuirse en ella. Quién aprende a vivir de verdad la vida, descubre que ésta esconde verdades y secretos que no todo el mundo alcanza a comprender. Una de las sendas que nos lleva a profundizar más en la realidad y a experimentarla de una manera muy diferente a cómo lo habíamos hecho hasta ahora es la fotografía.

             Aquél que descubre la fotografía y se asoma a su práctica, va poco a poco adquiriendo unas facultades que están en nosotros, pero no surgen espontáneamente, sino que han de ser sometidas a entrenamiento. Una de esas facultades es aprender a ver la belleza de las formas.

             La belleza de las formas no solo reside en ellas, sino también en la relación que hay entre las cosas. Por ejemplo: No es lo mismo la belleza de un lápiz rojo, que la belleza de un montón de lápices de colores ordenados según su color y formando un abanico. Al relacionarse con mayor número, con colores ordenados y creando una forma de abanico, conseguimos realzar la belleza de las formas, no solo de la forma de un lápiz, sino también de la forma de un abanico, todo esto apoyado por la diversidad ordenada de sus colores.

             La belleza de las formas está ahí, solo que no es evidente de un vistazo. Hay que buscarla.

             El ejemplo del lápiz nos enseña a modificar la ubicación de las cosas para crear belleza, sin embargo, en fotografía, la mayoría de la veces no vamos a poder modificar la realidad, sino que vamos a tener el lápiz y punto. En este caso nuestro aporte podría ser ubicar la luz para darle una luz que mostrara la belleza del lápiz.

             El momento más complejo es cuando el sujeto y la luz son los que hay y no se pueden reubicar, entonces, solo la maestría del fotógrafo captando el momento, la expresión o fotografiando desde un punto concreto, sabrá hacernos descubrir la belleza del momento o el mensaje concreto.

             Nuestro quehacer más importante si queremos hacer fotografía es encontrar ese punto concreto desde el cual la fotografía resulta distinta al resto de encuadres. Así podemos estar hablando de la diferencia entre una fotografía que no transmite nada o poco, y una fotografía conmovedora. Ambas tomadas en el mismo instante y con la misma cámara, pero desde ubicaciones distintas.


APRENDIENDO A VER

             Para aprender a ver la belleza de las formas, lo peor que podemos hacer es coger la cámara e irnos a la calle buscando algo bonito que nos llame la atención. Si no hemos educado la mirada, de nada nos servirá la cámara.

             Lo primero que debemos repetirnos es que la belleza está ahí contigo, ahora, y tiene mucho que ver con la relación entre las cosas.

             El ejercicio que os propongo es buscar la belleza de las formas en vuestra casa. Vamos a componer nuestra fotografía con nuestra vista primero, sin coger la cámara. Debemos mirar con detenimiento las formas geométricas, círculos o elipses, líneas paralelas o que se cruzan, rectángulos y cuadrados, aquello que llame la atención por su forma y que pudiera ganar interés en relación con algo. Una vez vistas las fotografías con la vista, podemos coger la cámara y ver si la composición puede funcionar.

              Yo he hecho el ejercicio sólo y exclusivamente en el salón de mi casa. He buscado todos estos valores, así como reflejos, contraluces... y relacionándolos he conseguido descubrir la belleza de las formas que se presentaba oculta ante mi.

               Mientras escribo esto, tengo delante una vitrina de madera en la que guardo una vajilla. Es rectangular, de madera, y tiene unos cristales. Los cristales crean reflejos que pueden ser aprovechados para ver otras cosas. En este caso, la luz de la lámpara del salón aportará el interés en la luz, teniendo un único punto de iluminación que creará volumen mediante las sombras generadas.

               Simplemente moviéndome con la cámara voy a tratar de descubrir donde está la belleza en la relación con las cosas. Como veis, no hago la fotografía porque hay belleza o interés, sino que, viendo que no hay interés a primera vista, busco detenidamente si pudiera haber una composición oculta que en determinada posición del fotógrafo nos diera como resultado una fotografía interesante.



                 Esta composición es interesante porque muestra el reflejo de la lámpara clásica del salón en la vitrina de la vajilla. Como veis llama la atención y el resultado convence. Como el color no es nada interesante, voy a potenciar la atención en el tono y realizo las tomas a blanco y negro.

                 Para no distraer, hago las fotografías con un tele de unos 200mm. a nºf bajo, es decir, a diafragma abierto, y así discrimino por desenfoque el primer plano, que no me interesa que desaparezca del todo, sino que se siga viendo que es una vitrina y que lo que se ve es un reflejo en su cristalera.

                 Para que no moleste, la lámpara está apagada, y la luz es un contraluz de una lámpara de pie de salón normal y corriente.

                  Si enfocamos en el primer plano obtenemos esta imagen:


                     Vemos que ha perdido todo el interés y misterio, pues el reflejo de la lámpara queda más como algo que estorba que como un valor compositivo.

                      Debido a la ubicación, veis que he compuesto con la vitrina recta por la derecha, pero queda inclinada tanto por arriba como por abajo. Esto hace que con el foco puesto así en primer plano, esto se interprete como un error más que como algo adrede, por eso, volveremos a desenfocar la vitrina y a recuperar el reflejo, pero esta vez iremos más allá y el enfoque lo daremos a la pared de detrás de la lámpara:


                          En este caso vemos que la toma también tiene interés, para mi gusto, la mejor, pues convertimos la fotografía casi en un cuadro, en arte, ya que difuminamos casi todo salvo la pared, de modo que la vitrina no se ve con claridad pero se intuye, y lo mismo sucede con el brazo de la lámpara, que ciertamente es un centro de atención en el que destaca claramente su forma pero de manera muy suave.

                         Con todo, es una composición que no acaba de convencerme, pues descubro 2 fallos que no me gustan, como son un taco que hay en la pared de un cuadro antiguo, y que se ve como un punto oscuro en la parte inferior de la cristalera, y un cuadro que se refleja en la cristalera de la izquierda de la fotografía. La solución puede venir mediante Photoshop o quitar ese cuadro de la pared y tapar el taco, pero puesto que estamos intentando no tocar el entorno en exceso, y hacer fotografía y no retoque digital, buscaremos otra composición con los mismos elementos acercándonos un poco. Así aprenderemos a componer mejor.




              Esta es la nueva composición sin que se vean los errores, y de nosotros depende escoger cual de las 3 tomas será la elegida como buena. He mantenido el reflejo de la lámpara porque creo que es un valor añadido en la fotografía.

              Como veis, la composición sin recorte nos hace dejar dentro los tiradores, y no queda mal, sino que aporta diferencia en la excesiva geometría de la cristalera. Sin embargo, he creído ver la belleza de las formas en esa lámpara y he querido destacarla como algo inusual dentro de una toma más corriente y no tan encuadrada. ¿El resultado final? os lo muestro

     
                 De esta manera hago una fotografía corriente en la que destaca una forma elegante que es el brazo de la lámpara, y para darle todo el énfasis, desenfoco todo con un diafragma muy abierto y centro el foco en el objeto que quiero realzar.

                  La composición no es al azar, la vitrina está centrada por abajo y crea un paralelismo con la línea de arriba formando una especie de 'Z' al revés. La foto desenfocada en la balda de la derecha nos muestra que lo que estamos viendo es una habitación. Se puede decir que en una fotografía normal hemos descubierto un sujeto interesante que por sus formas nos transmite sensación de belleza al relacionarse con el todo.

                  Busquemos ahora otra composición diferente. Fijémonos en la lámpara, que tiene unas formas muy sugerentes.


                   He buscado esta composición porque contrasta el clasicismo de la lámpara con la sobriedad del techo y la pared.

                    Es interesante la perspectiva que da la línea del fondo, que no es ni más ni menos que la separación entre pared y techo. Esta fotografía está a f/16, con mucha profundidad de campo. Vamos a estudiar la imagen.

                   Vemos que hay 2 imperfecciones en el comienzo y final de la línea del fondo. A la derecha una alcayata de la pared, y a la izquierda forma una esquina con otra pared que rompe la continuidad de la línea. Aunque son imperfecciones muy pequeñas, se ven, y debemos buscar acabar la imagen lo más perféctamente posible. Si podemos recomponer lo hacemos, y salvamos la situación, sino, la solución vendrá reduciendo la profundidad de campo.

                   A f/8 tenemos este resultado


                  Observamos que las imperfecciones se han atenuado y la imagen ha ganado profundidad debido al desenfoque. Llevemos al extremo la abertura de diafragma a ver qué sucede.


                 Ahora, las imperfecciones que teníamos prácticamente han desaparecido y no molestan. Además, la poca profundidad de campo ha hecho que el conjunto gane en interés y de una percepción de profundidad. Debemos elegir bien el punto de enfoque para que no quede el objeto principal excesivamente desenfocado.

                A pesar de que me gusta, vamos a hacer que gane algo más de interés.

                Si os fijáis, la sombra de la lámpara crea una línea que no llega a ser paralela con la que forma la pared del fondo. Podemos aprovechar que la línea del fondo se dirige hacia la luz, y si podemos mover la lámpara, vamos a intentar que la sombra cree una línea que se dirija a un punto imaginario por la derecha que cree el mismo efecto que se crea con la línea de abajo.





                
                  Vemos que la línea de sombra ha cambiado, creando un recorrido muy parecido al que surge por abajo, dirigiéndose ambas líneas a la luz de la lámpara. Al mover la luz, también vemos que ha creado mayor interés al conjunto y hemos generado un contraluz en la lámpara que resalta aún más sus formas.

                   Como veis la composición es muy importante para nuestras fotografías, un tema muy amplio que no voy a explicar aquí, pero que juega con muchos factores como la simetría o la asimetría, la calma o la tensión, o incluso ambos a la vez. Es esencial para resaltar la belleza de las formas y ver su relación.

                   Debemos evitar la arbitrariedad en nuestras tomas. Hemos de buscar la fotografía y trabajarla si nos da tiempo. Con la práctica podremos captar instantes irrepetibles y componer en décimas de segundo.

                  Voy a seguir buscando por el salón de mi casa a ver si consigo descubrir algo nuevo. Vamos a composiciones más abstractas.

                  Da la casualidad de que hay una escalera que tengo pendiente de mover a su sitio. Sin necesidad de moverla (aunque se podría hacer) veo que hay una composición probable.



                   No es una composición fácil de ver, pero el juego visual consiste en los paralelismos verticales de la pared y las cortinas iluminadas por la luz de la ventana, así como la diferencia de tonalidades. A esto le añadimos la textura de la base de la escalera que forma perpendiculares a las líneas verticales. Cómo la escalera está 'mirando' ligeramente a la izquierda, no la situo en el centro, sino un poco a la derecha, para dejar algo de espacio hacia donde 'mira' la escalera. Como casi todas las líneas son verticales elijo una toma en vertical que refuerze la sensación de verticalidad.

                   En este caso he usado la luz que hay, sin mover la lámpara. Si modificamos la luz podremos hacer que gane interés mediante sombras y volumen, pero imaginemos que no podemos modificar la luz. ¿Cómo daríamos un toque especial a la fotografía?

                   Os muestro un resultado diferente.


                     Es la misma toma pero con poca profundidad de campo y el enfoque ubicado en la pared del fondo, de manera que lo que gana interés es la iluminación del fondo, pero pasando la mirada através de la escalera. Esto funciona muy bien para sacar a personas através de objetos. Si os fijáis, la escalera está tan desenfocada que la mirada se va a la pared y a la cortina, que es donde está la parte de mayor iluminación, y tenemos que hacer un esfuerzo en la vista para ver la escalera, pues aunque está delante, pasa desapercibida respecto al fondo. Es un curioso efecto de composición que podemos usar para nuestras fotografías.

                      Vamos a buscar una última imagen.

                        En mi salón tengo una rosa de cristal, de adorno. Vamos a jugar con su sombra proyectada en la pared iluminando con una linterna para dar mayor potencia de luz y centrar la mirada en el sujeto principal

  
                        Sin acercar mucho la linterna conseguimos esta hermosa sombra que nos puede dar pié a un buen título para nuestra fotografía. Como podéis ver, hay una total sencillez de elementos: la sombra y la pared, nada más. La composición puede ser horizontal o vertical, da mucho juego, con la rosa enderezada o torcida. Como la sombra mira a la izquierda, en la izquierda dejo más espacio. El espacio es muy importante en la composición.

                        ¿Cómo añadir interés sin añadir elementos? Podemos acercar la linterna y tenemos este resultado.


                          Ahora la linterna ha creado un viñeteado natural que hace que la imagen tenga mayor interés, aparte de que ha aumentado la luz en el centro de la imagen.

                         Todos estos recursos aplicados a un salón normal y corriente han dado lugar a estas fotografías. Solo debemos aprender a ver la belleza de las formas y su relación con los objetos que los rodean. Es cuestión de práctica e imaginación, todo se aprende.

                          Evidentemente, es importante ir ampliando nuestras nociones de composición a la vez que vamos intentando estos ejercicios. Imaginaos qué podréis sacar en una ciudad o en un evento en el que tengáis que fotografiar, y esto son solo 4 cosillas mal explicadas de composición.

                         Os animo a profundizar y a hacer estos ejercicios sencillos de ver en lo que tenemos cerca y accesible.

                          Un saludo a todos y espero haber despertado vuestra curiosidad fotográfica.





domingo, 5 de junio de 2011

Fotografía Elegante: Tim Flach

No sabía cómo titular el tipo de foatografía que realiza Tim Flach, creo que la elegancia es el factor predominante. Una elegancia que está precedida de una buena composición fotográfica.

Tim Flach fotografía principalmente perros y caballos, aunque también tiene otros animales, a los cuales les da personalidad propia, casi parecen humanos. Se vale de la composición, uno o dos flashes, un fondo negro o blanco y, por supuesto, una buena cámara.

Los instantes que capta son únicos, y consigue crear una personalidad propia a los animales. Su fotografía es un aliciente más para que nos animemos a progresar en nuestra fotografía, pues no es una fotografía técnicamente dificil de hacer, puesto que no utiliza grandes artilugios ni hace paisajes remotos, es una fotografía a nuestro alcance, que bien la podemos aplicar si tenemos un animaliato en casa.

Las claves de su fotografía son saber componer e iluminar. Si nos esforzamos y ensayamos, lograremos hacer fotografías como las suyas. Quizá, si nuestra cámara y objetivo no son buenos, sacaremos peor nitidez, pero la fotografía será igual de buena.

Ánimo y probad en casa o con el perro del vecino.

Espero que os guste:

http://www.timflach.com/

jueves, 12 de mayo de 2011

Fotografiar arquitectura

Fotografiar arquitectura es siempre un aliciente por muchas razones. En primer lugar porque el sujeto no suele moverse, y en segundo lugar, porque se presta a destacar no solo el sujeto entero, sino sus múltiples detalles.

Las aplicaciones son infinitas. Puede aplicarse además la fotografía surrealista, la interacción con otros motivos arquitectónicos o con personas o animales, puede hacerse en clave de humor o como denuncia social... la fotografía de arquitectura es quizá la gran marginada de todas las aplicaciones fotográficas y sin embargo una de las que más pueden desarrollar nuestro 'ojo fotográfico' y nuestra capacidad de ver lo que está oculto para los demás.


Os pongo varios ejemplos con distintos métodos expresivos o técnicas:

En este primer ejemplo os muestro unas chimeneas.


Era un día nublado que no aportaba cielo a las imágenes, pero daba una luz suave muy agradable. Podemos dar una vuelta de tuerca más si en vez de dejar la imagen así le damos un aire pictórico surrealista.

La imagen está hecha con trípode, con lo cual decidí desenfocarla y comprobar cual era el efecto que creaba el desenfoque. Los efectos que surgieron eran muchos, pero solo uno me parecía interesante. Así que lo desenfoqué en ese punto y puse el diafragma en f/3,5 para quitarle profundidad de campo y que desenfocara correctamente. El resultado es el siguiente:


Así se consigue crear cierto misterio y no se sabe si se trata de una pintura o una fotografía. Es una manera de ir creando nuestro propio estilo y abriendo nuevas puertas a la imaginación y expresividad. Esto no quiere decir que obviemos la composición. Como veis, la composición sigue unas lineas que llevan la mirada perfectamente. No debemos descuidar nunca la composición.


En arquitectura interior debemos fijarnos mucho en las líneas y en la profundidad, así como de qué manera vamos a mostrarlas en nuestra fotografía para que verdaderamente se vea que hay profundidad y se dirija la mirada del espectador hacia donde pretendemos.



En estas dos fotografías de la Catedral de Córdoba, he jugado con la luz, con la profundidad, con el enfoque y la profundidad de campo. Todos esos son nuestros aliados, y hemos de saber utilizarlos.

El uso de flash en interiores no se recomienda salvo que deseemos crear nuestra propia luz. Esto hará que estemos limitados por nuestro material (cámara, objetivo, trípode...).

Como veis, la composición no debe estar sobrecargada (Ejemplo 1), y si está sobrecargada, la diferencia de luminosidad, el tono, el enfoque y los colores, nos ayudarán a separar planos distintos (Ejemplo 2).


Otro de los problemas con los que nos vamos a topar es con la deformación de los objetivos, que se pueden solucionar con los carísimos objetivos específicos para ello o mediante software.

En el siguiente caso vemos una fotografía tomada con su deformación de objetivo:


Debemos corregirlo para que quede tal y como es en la realidad. Yo lo he hecho por software:


Esto hará que en el momento de hacer la foto contemos con dejar algo de espacio extra por arriba y por abajo para que podamos después recortar la fotografía y darle el formato normal.


A veces, la simplicidad combinada con la luz dan un efecto más que suficiente para crear una fotografía con suficiente interés y belleza.


En este caso, el elemento es una rejilla de respiración de una de las bonitas casas que tiene el casco antiguo de Córdoba. A esto se ha unido una luz totalmente lateral que realza el pequeño relieve de la pared dando textura y llenando lo que de otra forma sería una simple pared blanca. En este caso es la luz del sol, pero podemos crearla nosotros con uno o dos flashes.


Otros ejemplos de juego de luz son aquellos lugares oscuros por los que penetra la luz exterior. De esta manera creamos un ambiente especial e incluso podemos lanzar un mensaje al espectador que puede ser objetivo o subjetivo y abierto a diversas interpretaciones.




Para la fotografía de arquitectura también podemos valernos de los filtros de densidad neutra de 6 o 10 diafragmas. Con ellos podremos hacer fotografías de larga exposición, haciendo que desaparezca en gran medida el trasiego de gente de una concurrida calle o los coches. Los transeúntes aparecerán como una leve niebla cuando hacemos una fotografía a 30sg.



De igual manera, podemos usar el filtro de densidad neutra para arquitectura de fuentes, utilizándolo o no, según queramos el efecto del agua. Los resultados son distintos, y la belleza que se crea es notablemente mayor con el agua como un chorro continuo difuso.




También resulta interesante el uso del polarizador circular para tratar los colores y los reflejos. Siempre con moderación para que no se perciba su uso y no queden las esquinas de nuestras fotos de color negro u oscuras. En este caso el uso del polarizador se ha usado para ennegrecer el cielo azul y crear un aire más misterioso.


Sin el polarizador queda así:



En muchas ocasiones el rango focal sobrepasará el nivel máximo que el sensor de nuestra cámara es capaz de captar, por este motivo nos veremos forzados a utilizar la técnica de HDR, que nos permitirá sacar todo en su justa luz mediante 3 fotografías con distinta luminosidad.

Hay que tener un cuidado extremo con esta técnica, pues muchas personas intentan resaltar su fotografía acentuando las luces de sus tomas con HDR, no podemos acostumbrarnos a crear la fotografía en el ordenador, sino en el momento, por eso debemos aprender bien, hacer bien la fotografía y luego jugar con ella en el ordenador, pero siempre sabiendo hacer fotografía, nunca al revés. De lo contrario, nunca pasaremos de iniciados en el mundo de la fotografía.

El HDR lleva añadida la dificultad de que el resultado final sea adecuado. El 90% de los HDR que veo por internet tienen los mismos errores, colores irreales y bordes con luz. Para que el HDR nos quede bien debemos poner los parámetros en su justa medida. La mayoría de las veces pasa por pequeños ajustes. El mejor resultado para mi gusto es el que no se nota.

En este caso hice un HDR, ya que la diferencia entre sol y sombra era tremenda. Además, como podéis ver, dejé espacio suficiente por arriba y por abajo. Después en el software, enderecé el edificio y recorté para sacar la composición que quería desde un principio. Finalmente, el virado a blanco y negro y un realzado de enfoque le dio el aspecto final.


Los reflejos también son muy importantes en fotografía de arquitectura. Hemos de aprender a jugar con ellos


Lo que más acostumbrados estamos a ver es el juego entre líneas y curvas o las fotografías de detalle con profundidad a infinito. Os pongo diversos ejemplos


En el caso anterior, el juego de la estructura totalmente sinuosa con la rectilínea figura del edificio causa un efecto dispar que impresiona al espectador. También es muy importante la profundidad, que juega un papel esencial en el interés del conjunto. Además he aplicado un destello de flash en la estructura para evitar el exceso de sombras y dar volumen a las barras de la izquierda.


En este caso, se trata de que el espectador no sepa lo que está viendo y a la vez sienta una sensación de vértigo y cierta angustia.



Estas 2 últimas fotografías juegan también con la profundidad, los reflejos y la combinación de rectas y curvas.

Las fotografías están ahí. Debemos aprender a verlas, a crear composiciones en nuestra cabeza antes de verlas con la cámara. Es cuestión de practicar

La fotografía de arquitectura es apasionante. Ya es hora de que le demos un empujoncito y la practiquemos también nosotros.

PD: Siento haber tardado tanto en escribir, pero Abril y Mayo están resultando ser exhaustivos y no tengo apenas tiempo. Espero poder escribiros pronto.

sábado, 26 de marzo de 2011

Fotografía del Mundo: CARLOS DUARTE

Os presento a un fotógrafo primerizo, apenas lleva 6 años en la fotografía, sin embargo, fotografía como si llevara desde pequeñito.

Como él mismo dice, su fotografía es de paisaje, social y de retrato. Y todo, todo lo hace extraordinariamente bien. La luz de sus fotografías está muy bien conseguida y procesada.

De nuevo, un fotógrafo para admirar y del cual aprender.

http://www.carlosduartephotography.com/

Disfrutadlo.

Fotografía Curiosa: Erik Johansson

Si hace unos días os presentaba a Romain Laurent y su fotografía original, no menos original es la de Erik Johansson, que demuestra no solo ser un gran fotógrafo, sino dominar el Photoshop como un verdadero maestro.

Su fotografía no solo lleva un mensaje interno, sino que sería la delicia de cualquier buen publicista.

Merece la pena verlo y quedarse boquiabierto con sus creaciones imposibles. Algo de lo que podemos aprender mucho.

http://www.alltelleringet.com/

Un Saludo

sábado, 19 de marzo de 2011

¿Buscar la luz o Crear la luz?

Cuando le preguntas a un buen fotógrafo sobre qué es la fotografía, normalmente te dirá que la fotografía es pintar con luz. La luz es la que da vida a la foto.

Nosotros podemos valernos de la luz que hay o crear una luz nueva. La decisión sobre qué hacemos con la luz viene determinada por lo que queremos expresar con nuestra fotografía, es decir, su fin.

A continuación os pongo una misma fotografía vista desde distintos aspectos creativos. La primera es la fotografía tal cual, con unos mínimos ajustes de curvas, y las otras 2  han sido tratadas mediante software para crear una sensación diferente en el observador.





Como veis, la sensación al mirar es diferente. A algunos os gustará más una y a otros otra. Lo que es cierto, es que nos trae a la memoria sentimientos diferentes.

La primera fotografía tiene un color muy pálido, es el color real del momento. Era un día feo. Estas fotografías pueden expresar mucho más en blanco y negro, pues nos olvidamos del color y nos centramos en el tono.

La segunda tiene color, pero ya no es lo que predomina, está más centrada en el tono, sin llegar a ser blanco y negro, jugando mucho con la diferencia entre las sombras y la luz, sin crear un excesivo contraste. Da una sensación de miedo, de misterio.

En la tercera he potenciado el color y las sombras, para crear una sensación de añoranza y melancolía. Un paisaje idílico como de cuento.

La fotografía del momento, la que prácticamente no tiene modificación es la de muchos fotógrafos de naturaleza. Por ejemplo: José B. Ruiz.

La fotografía que crea luces especiales está muy generalizada en todas las disciplinas. Por ejemplo: Jose Mª Mellado.

No os pongo más ejemplos porque no terminaríamos nunca.

Debemos saber qué fotografía queremos hacer y qué sentimientos queremos expresar en quién lo vea. Antes de disparar hay que pensar.

La buena fotografía no está solo al alcance de unos pocos, sino de todos, pero una cosa es común: Aprender bien a hacer fotografía. No debemos caer en la tentación de crear grandes luces de fotografías mediocres, sino que debemos aprender bien a hacer fotografía y luego jugar con la luz mediante software o no según convenga al tipo de fotografía que queremos hacer.

Primer hay que ser buenos para después ser mejores.

miércoles, 16 de marzo de 2011

Fotografía Curiosa: Romain Laurent

No sabía si poner Fotografía curiosa o Fotógrafos que se aburren.

Os presento hoy a este fotógrafo que realiza una fotografía bastante curiosa e impactante. No digo más. El resto lo dejo a vuestro sabio juicio:

http://www.romain-laurent.com/